La importancia de la desinfección de la impresión y su carácter crítico en el ámbito odontológico

Qué elegir y qué hacer

Los productos protésicos y los aparatos ortodónticos, incluida la toma de impresión inicial, son vectores de contaminación, ya que pueden resultar infectados por la saliva o la sangre del paciente. Por este motivo, es indispensable adoptar unos protocolos muy estrictos que permitan controlar el riesgo biológico. A continuación veremos los criterios para elegir un desinfectante, los procedimientos que conviene seguir y los productos que ofrece Zhermack para la desinfección de impresiones.

El procedimiento de prevención consiste en lavar y desinfectar la impresión. Debe llevarse a cabo antes de su envío y a su vuelta del laboratorio dental [1]. Debe aplicarse también a los dispositivos protésicos y los aparatos ortodónticos en todas las fases de elaboración, hasta la entrega.

Por ello, es indispensable adoptar unos protocolos muy estrictos que permitan controlar el riesgo biológico. De hecho, los procedimientos de descontaminación inapropiados aumentan enormemente el factor de riesgo; por ejemplo, en 2010, la John Cochrane Veteran Administration informó a 1800 pacientes que se habían sometido a tratamientos dentales en sus centros de que podían haberse visto expuestos a infecciones virales debido a procedimientos de esterilización «no idóneos» [2].

Los aparatos sanitarios hechos a medida son vectores de transmisión de infecciones (de la clínica al laboratorio y viceversa). Desde la fase de toma de impresiones, es necesario lavar y desinfectar las prótesis. Tras el lavado, se procede a una desinfección de nivel medio/alto, a continuación se detalla el procedimiento.

Cómo elegir los desinfectantes

De acuerdo con una evaluación ideal, un desinfectante óptimo debe satisfacer toda una serie de requisitos que pueden subdividirse en esenciales y complementarios:

Requisitos esenciales:

• actividad biocida
• amplio espectro de acción
• acción rápida y prolongada (persistencia) de la actividad
• toxicidad para el uso (a los niveles de concentración durante el uso)
• inocuidad de cara a los materiales objeto del tratamiento
• facilidad de aplicación
• calidad y seguridad
• gestión sencilla y económica

Qué hacer

Todos los tratamientos odontológicos en los que haya que fabricar dispositivos individuales conllevan la toma de impresiones y el intercambio de elementos manufacturados y registros de las arcadas del paciente entre la clínica y laboratorio. Dichos intercambios suponen un riesgo de transmisión cruzada de infecciones por contacto con el material infectado [4].

Antes de su embalaje, las impresiones deben lavarse y desinfectarse en la clínica mediante inmersión o nebulización (espray). Conviene adoptar buenas prácticas, como por ejemplo verificar siempre las normas sobre actividad antimicrobiana del dispositivo desinfectante.

En la clínica dental, antes de enviar el material al laboratorio dental, el personal habrá que realizar las siguientes operaciones:

1. Lavar la prótesis o la impresión inmediatamente después de su retirada, ya que los residuos orgánicos, si no se eliminan de inmediato, inhiben la acción del desinfectante.
2. Esterilizar el material de manera que pueda soportar el tratamiento en autoclave o la desinfección física (metales y cerámica); descontaminar con desinfectante virucida los materiales no aptos para tratamientos físicos (impresiones, ceras, resinas). Durante las operaciones de desinfección, el personal deberá llevar los equipos de protección correspondientes (a ser posible, deberán ponérselos en la zona operativa donde se realice el tratamiento).
3. Tras la desinfección, el material se manipulará con guantes limpios para meterlo en una bolsita y sellarlo.
4. La prescripción se preparará fuera de la zona operativa y se meterá en una bolsa de plástico aparte para evitar cualquier contaminación.
5. Indicar en la prescripción el peligro de contagio y especificar las operaciones de desinfección realizadas. Es indispensable acordar con el responsable del laboratorio las modalidades de tratamiento del material y las operaciones de desinfección y de embalaje. Se aconseja que todo el personal que gestione productos manufacturados rellene listas de comprobación por escrito.
6. Las prótesis dentales, aparatos y cubetas que lleguen al laboratorio, antes de pasar a las zonas operativas, deben desinfectarse con desinfectantes virucidas como se indica más arriba. Hay que prestar particular atención a la desinfección del embalaje y a la correcta eliminación o desechado de los materiales procedentes del exterior.
7. Los materiales permeables (yeso, alginato) podrían no resultar completamente desinfectables a efectos de la COVID-19, por lo que se aconseja procesarlos con guantes y equipos de protección adecuados. Evitar el contacto de los productos contaminados con modelos en yeso. El uso de materiales hidrófugos (elastómeros para las impresiones, plásticos para los modelos) facilita los procedimientos de desinfección.
8. La digitalización de algunos procedimientos (impresiones, impresión de modelos, prescripciones) reduce el riesgo de contaminación cruzada [5].

Qué elegir

Para desinfectar impresiones, Zhermack ofrece productos de alto rendimiento y amplio espectro de acción, testados de conformidad con las normas europeas más recientes sobre desinfección y con un alto grado de compatibilidad con los diferentes tipos de materiales para toma de impresiones.

Los productos disponibles son dos:

• Z7 Spray: desinfectante listo para usar en formato espray para desinfección rápida de impresiones. Es un producto de base alcohólica y amplio espectro de acción. Además, es compatible con todos los materiales de impresión. No afecta a la estabilidad dimensional de los materiales y se adapta bien a una desinfección rápida (3 minutos) sin necesidad de enjuagado. Con un solo envase de espray, se pueden desinfectar hasta 250 impresiones.
• Z7 Solution: desinfectante concentrado a base de sales de amonio cuaternario y fenoxietanol. Tiene un amplio espectro de acción y no altera la estabilidad dimensional de las impresiones, por lo que puede utilizarse de manera segura sobre los materiales. Permite desinfectar un alto número de impresiones: con 1 litro de Z7 Solution, se pueden preparar 100 litros de solución desinfectante (dilución al 1%). Esto significa que, con 1 litro de Z7 Solution, se pueden desinfectar hasta 4000 impresiones en solución para 10 minutos.

Si se siguen las indicaciones del fabricante, ambos desinfectantes resultan activos contra el coronavirus.

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Bibliografía

1. Balsano L. Infezione crociata e rischio biologico in ambito odontoiatrico. Il Dentista Moderno- 2012
2. Finzi G. at al. Linee guida per il corretto utilizzo degli antisettici – disinfettanti. 2009
3. Chidambaranathan AS, Balasubramanium M. Comprehensive Review and Comparison of the Disinfection Techniques Currently Available in the Literature. J Prosthodont. 2019 Feb;28(2):849-856
4. DIRECTRICES OPERATIVAS PARA LAS ACTIVIDADES ODONTOLÓGICAS DURANTE LA FASE 2 DE LA PANDEMIA COVID-19 – 2020